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Las últimas horas de la carrera hacia la presidencia

Los dos candidatos a la presidencia de los Estados Unidos, el republicano y actual presidente Donald Trump y el demócrata Joe Biden, vivieron hoy la última jornada preelectoral de cara al “dia D”, en el que los estadounidenses concurrirán a las urnas, además de los casi 94 millones que ya sufragaron por adelantado.

El ambiente político es muy intenso en la capital de los Estados Unidos mientras se desarrolló el último día de campaña, en el cual ambos candidatos intentaron empujar a los votantes a decidir por cada uno de ellos, sobre todo en los estados considerados “clave” por la cantidad de electores que representan para cada uno.

Biden se centró en Ohio y Pennsylvania, estado en el que, de ganar, dejaría casi sin posibilidades a Trump. “El poder de cambiar este país está en sus manos” dijo Biden y agregó que “no importa lo que Trump haga, ustedes, los electores, deciden”.

 En cambio, el presidente desfiló por Carolina del Norte, Michigan, Wisconsin y Pennsylvania, los estados en los que ganó en 2016 y ahora batalla. “Yo soy su voz y daré una sorpresa igual que en el 2016”, dijo, Trump durante la maratónica jornada.

Se calcula que el resultado de las elecciones dependerá, en gran medida, del conteo de los votos por correo, que ya sobrepasaron los 93 millones. “No vamos a saber, con certeza, por varios días, quién ganó la presidencia, aseguró el analista Phillip Escoriaza.

La nación se encuentra en una encrucijada, golpeada fuertemente por la pandemia, el desempleo, que en este momento afecta a más de 20 millones de personas, y la escalada del problema racial, que tuvo manifestaciones a lo largo del año y consecuencias que aún se viven en varios estados y, particularmente, en la capital del país.

La Casa Blanca, por ejemplo, fue vallada durante el día de hoy, para que esté resguardada en caso de hechos vandálicos que se vienen rumorando en los últimos días. Negocios, oficinas y hoteles cubrieron con maderas sus fachadas.

Estas medidas, inéditas en estas latitudes, muestran un país que espera celebrar, en los próximos días, el triunfo de una democracia que deberá sobrevivir a problemas nuevos y antiguos, pero aún vigentes.

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