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Pruebas Aprender: casi se duplicó la cantidad de alumnos que no llega al nivel esperado en Lengua

El Gobierno nacional difundió los resultados del primer operativo de evaluación que muestra el duro impacto del cierre de escuelas por la pandemia.

Los chicos pobres fueron los más afectados.

El Gobierno nacional difundió este martes los resultados de las pruebas Aprender, que muestran el fuerte impacto educativo del cierre de las escuelas por la pandemia. La evaluación fue tomada en diciembre del año pasado a todos los los alumnos de sexto grado del país.

El resultado fue una fuerte caída en comprensión de textos y una relativa estabilidad (aunque de bajo nivel) en los conocimientos de Matemática.

En concreto, y en Lengua, hoy tras la pandemia hay casi el doble de alumnos que no alcanzan un nivel satisfactorio. El 44% de los alumnos de sexto grado del país ahora tiene dificultades para comprender un texto adaptado a su edad. No pueden jerarquizar la información ni tienen incorporado la práctica de la relectura ni pueden reflexionar sobre el tipo de narrador o las características de los personajes, entre otras dificultades.

En 2018, el último año en que se había tomado esta prueba en la primaria, el porcentaje era del 24,7%.

Desde el Gobierno dijeron que aquella prueba de 2018 tiene «salvedades» estadísticas: observaciones como que fue alterado el orden en que se hacen las pruebas de Lengua y Matemática o los «criterios de corte» y por eso había dado mejores resultados, dijeron.

El mayor impacto se produjo entre los alumnos más pobres, donde el desempeño en Lengua ya llega a niveles alarmantes. Casi 7 de cada 10 alumnos del nivel socioeconómico bajo (68,1%) hoy no llega a un nivel satisfactoria en comprensión de textos. Y 4 de cada 10 (el 41,9%) ni siquiera llega al nivel básico. Está por debajo del básico.

En Matemática, en cambio, la pandemia no provocó un impacto tan dramático. Aún partiendo de un nivel bajo prepandemia, los resultados de esta nueva edición de Aprender 2021 entregan valores que son «estadísticamente estables», según dijeron los expertos del Ministerio de Educación.

En números: en el año 2018 era 42,6% el porcentaje de alumnos que no llegaba a un nivel satisfactorio. Ahora, en Aprender 2021 ese porcentaje asciende a 45,2%.

El crecimiento fue de 2,6 puntos porcentuales. «Vemos problemas, que son consecuencia de la pandemia y que vienen desde antes inclusive. La pandemia potenció los problemas en Lengua que ya teníamos. La prueba de Unesco de 2019 mostraron que la Argentina había bajado en los últimos años en los que hubo desfinanciamiento de la educación», dijo el ministro de Educación Jaime Perczyk.

Una prueba esperada

Los resultados de la prueba Aprender de 2021 eran muy esperados entre los especialistas de educación, quienes recién ahora cuentan con la primera radiografía que muestra cómo impactó el cierre de escuelas en la educación. La última prueba Aprender, que es anual, se había hecho en 2019. En 2020 se había interrumpido por la pandemia.

El “Operativo Aprender” es una prueba estandarizada que mide los conocimientos de Matemática y Lengua de todos los estudiantes que están cursando sexto grado de la primaria y el último de la secundaria en el país. Se les toma lo mismo y en el mismo día, a todos esos alumnos de todas las escuelas públicas y privadas del país. También se hace una prueba muestral de Ciencias Naturales y Ciencias Sociales.

El objetivo de la prueba es contar con información detallada de los aprendizajes logrados por los alumnos argentinos y su evolución a través del tiempo. Esto sirve no sólo para saber cómo estamos sino también como insumo para tomar decisiones de política educativa.

Si bien en algún momento se tomaba la prueba todos los años a los alumnos de primaria y secundaria, desde 2018 se decidió que el operativo sería bianual: desde entonces, un año se les toma a los alumnos de la primaria y al siguiente a los de la secundaria.

Como la prueba de 2019 había sido tomada a estudiantes secundarios, el Gobierno determinó que la prueba de 2021 fuera solo para la primaria. Algunas voces criticaron esta decisión. Dijeron que tras la pandemia era urgente medir el impacto de la interrupción de las clases en los dos niveles educativos y no dejar la secundaria para este año con los resultados recién para 2023. Mucho tiempo para corregir rumbos, afirman.

Los resultados de la anterior Aprender

La última edición de Aprender en primaria se hizo en 2018. Los resultados mostraron, entonces, una mejoría en Lengua, y una leve caída en Matemática.

En comprensión de textos, había crecido en 8 puntos porcentuales la cantidad de chicos de sexto grado de todo el país que alcanzaron un nivel satisfactorio. Sin embargo, un 25% de los alumnos no pudieron jerarquizar información ni tuvieron incorporado la práctica de la relectura de un texto ni la profundización en escritos donde deben reflexionar sobre el tipo de narrador o las características psicológicas de los personajes.

En Matemática, el 43% de los chicos no alcanzaron un nivel satisfactorio. Eso significa que estos estudiantes no lograron identificar propiedades específicas de las figuras geométricas ni calcular el área o trabajar con equivalencia de medidas de longitud. Además, mostraron dificultad en resolver situaciones problemáticas que involucran operaciones con fracciones o la división de números naturales con análisis del resto.

Ante la consulta sobre cómo empezar a revertir la crisis de aprendizaje, Perczyk enumeró seis políticas:

  • 1) mejorar las condiciones sociales de los chicos;
  • 2) fortalecer el nivel educativo de la familia, con programas de finalización de la secundaria;
  • 3) más días y horas de clase;
  • 4) entrega de 8.2 millones de libros a los estudiantes;
  • 5) lograr que los chicos ingresen antes al nivel inicial;
  • 6) programa de capacitación docente con una inversión de 3 mil millones de pesos.

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