Albarracín: “La ley de cupo laboral trans colisiona con principios constitucionales”

El parlamentario se refirió al repudio que recibió de parte de algunos de sus pares por manifestar su rechazo al proyecto que estableció el cupo para personas trans en el ingreso a la administración pública.
La Legislatura aprobó este jueves la iniciativa que promueve un cupo laboral mínimo para personas travestis y transexuales en la Administración Pública de la provincia, medida que fue dispuesta por decreto presidencial a nivel nacional en septiembre.
Este mismo proyecto había generado duros cruces entre legisladores de la composición anterior cuando se trató en agosto de 2017. Esta situación se repitió en la última sesión.
El legislador Raúl Albarracín fue uno de los parlamentarios que expresó su negativa. «Ponderó la labor de mis pares en búsqueda de la inclusión y la no discriminación pero, considero que el proyecto en cuestión colisiona con el principio de igualdad ante la ley plasmado en el art. 16 de la Constitución Nacional, el cual reza: Todos sus habitantes son iguales ante la Ley y admisibles en los empleos sin otra condición que la idoneidad», justificó.
«Es decir, se trata de una Ley viciada de inconstitucionalidad por privilegiar a una minoría, a un sector o a un colectivo por determinadas condiciones personales. Por ello, como en 2017, pedí la vuelta a comisión, específicamente a la Comisión de Asuntos Constitucionales e Institucionales, que tiene competencia en todo lo relacionado con los principios que derivan de nuestra Constitución Nacional, y también consideré necesario un análisis de la Comisión de Hacienda ya que no se puede avanzar en un proyecto de estas características sin ese dictamen ni un estudio del impacto financiero que produce», añadió.
En ese sentido, para Albarracín «no son condiciones de idoneidad, por ejemplo, el sexo, la religión o las creencias políticas por lo que sería inconstitucional una norma que se apoye en esos supuestos», y agregó «no soy amigo de las discriminaciones. El Estado cuenta con otras herramientas y mecanismos para generar inclusión y evitar discriminaciones pero este proyecto no es la vía correcta, toda vez que es necesario poner en igualdad de condiciones a todas las personas».
El radical enfatizó en que el hecho de no observar estos principios legales y constitucionales de idoneidad e igualdad para ocupar un cargo en la administración pública generaría antecedentes para que otras minorías puedan reclamar una norma similar para ingresar a los empleos públicos.
«Lamento el repudio y que me hayan increpado quienes propulsaron esta norma sólo por el hecho se expresar mi opinión y disentir con su proyecto, ello pone en evidencia la intolerancia de los que se dicen tolerantes. Si queremos construir un Tucumán con inclusión y ser tolerantes debemos trabajar y entender que se puede disentir desde el respeto», finalizó Albarracín.