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Carta a un amanecer sin pandemia

Por Tona Sobre Casas

¡Amaneció  el día tan esperado!

Una vacuna derrotó al enemigo viral. Ese  maldito enemigo que durante días, meses y años nos acosó   sin piedad.

Nos laceraba.  Nos mataba,.

El día  nos ofreció un sol enorme. Se había sumado a nuestra alegría.  Todos gozosos festejabamos la noticia . Los días tristes producto  del encierro quedaron atrás junto al olor a lavandina y alcohol. Ya no teníamos  que usar el barbijo  que si bien nos protegía, también nos separaba. Ya que a muchos  seres conocidos los desconocíamos  trtas el triángulo que cubría casi la mitad de nuestros rostros.

¡Cuántos planes   para este día. Suman tantos…

Quienes estamos en el jubileo, salimos con regocijo a caminar por las plazas o por los parques . Necesitamos s disfrutar de la libertad perdida por temor al contagio.

Diferentes colores de verde  se pegan a mis ojos. Antes no había reparado en eso.  Saludo  a mis vecinos .con alegría. Nos encontramos, sonreímos, dialogamos   

Es un día  genesial  no solo en el plano material sino en la interioridad de nuestro ser . Es que  asumo cuan finito somos y cuantos problemas nos hacíamos por cosas sin importancia.

Veo en el prójimo a mi hermano. Nos unió el dolor, la ansiedad, el haber orado juntos pidiendo salud.

 Hoy puedo abrazar a mis hijos, nietos y bisnietos. Conversar y  reír con ellos. Juntarme con amigas a contar, escuchar sus problemas o simplemente a charlar,   es decir estar con ellas mis  hermanas de la vida. Miro los árboles donde muchos pájaros se afincaron. Hicieron sus nidos. Ellos, no estaban preocupados, no sabían de pandemia, eran libres

¡El vivir es tan hermoso!

El contacto con el otro, nuestros amigos, vecinos y hasta  con quienes nos vende nuestros alimentos, nos generan  gozo  con solo verlos.

 La pesadilla quedó atrás. Hoy disfrutemos de este milagro que nos hizo encontrarnos, aceptarnos y reconocer las necesidades y sobre todo ayudar para poder ser feliz.

 Disfrutemos de esta oportunidad para compartir con palabras y hechos lo que muchas veces olvidamos:  el mirar a los que nos rodean con amor de hermanos.

 Bienvenido amanecer pos pandemia. Acompáñanos en nuestra transformación.

 Del Libro: La Peste en el decurso de una vida. CGCET. 2020

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