Vivir después del Covid

Yo tuve Coronavirus. Muchos nos preguntábamos hace un par de semanas qué nos pasaría si fuéramos infectados. La suma de todos lo miedos parecía ser la respuesta.Miedo a la complicación.Miedo a generar una neumonía bilateral y descompensación de todos los sistemas del organismo. Pero puedo relatar que el miedo a contagiar a quienes están a tu alrededor, es el miedo más grande.

Fiebre, dolor intenso de cabeza, cansancio extremo, tos y difilcultades para respirar parecen ser nada cuando te preguntas a quién pude haber contagiado. Tal vez trasmití el virus a compañeros de trabajo y a mi familia. Es entonces que todas tus estructuras y las fortalezas parecen derrumbarse.

Cuando tu menudo físico es el huésped de ese enorme enemigo invisible, pasan los días y hasta las semanas y sóolo te quedan las huellas en el cuerpo y en el alma.

Muchos tuvieron que vivir también estigmatizaciones sociales. Ser señalados sólo por el hecho de haberse contagiado.Otros, a quienes nunca vamos a olvidar, la mujer de la guadaña les arrebató lo más preciado, la vida.

Los hombres y mujeres de blanco son nuestros héroes y la recompensa para ellos no tiene precio. O tal vez, la recompensa material también es una forma de agradecerle. De eso se tienen que encargar los que administran el estado.

Ser sobreviviente a esta pandemia no es algo que vos te lo ganaste, para mí es una marca, quizás una anécdota en mi historia, que fue superada, pero que me unió en un abrazo solidario a millones de hermanos en el mundo, en un oscuro lazo, pero siempre con la esperanza en que esta negra nube pasará y nuevamente brillará el sol en la humanidad.