¿Cuánto se paga por energía eléctrica en cada provincia?
Un tema que es recurrente en las conversaciones es el valor de la tarifa eléctrica en el país. Cuánto se paga y por qué existen disparidades entre los valores que pagamos los tucumanos con los de las otras provincias. CABA tiene la tarifa más baja, naturalmente

Un informe de la Asociación de Distribuidoras Eléctrica de la República Argentina (ADEERA), entidad que nuclea a todas las empresas – estatales o privadas – a cargo de la distribución de la energía en el país, pone luz a los valores que se pagan en las distintas provincias.
Según ADEERA, la tarifa más alta del país la pagan en la provincia de Chubut, y la más baja – como era de esperar – en CABA. Así los demás distritos se mueven entre los $ 5155 que pagan los chubutenses y los $ 1640 de los que residen en CABA Sur. Tucumán se encuentra en el puesto 13, con una tarifa promedio de $ 3328 por mes, para un consumo promedio de 250 Kwh, sin contar la tarifa social de la cual son beneficiarios 270.000 usuarios. En ese caso, desde la empresa informaron que el promedio de la factura es de $ 2300 aproximadamente.
El informe oficial pone de manifiesto las disparidades en las que se ven sometidas las distintas jurisdicciones del país, aunque los especialistas afirman que no es correcto comparar las tarifas entre provincias – por las particularidades de cada caso –.
La tarifa de energía eléctrica se compone de tres ítems: el ingreso de la Distribuidora (Valor Agregado de Distribución o VAD), el costo de producir la energía y transportarla, y los impuestos. En Tucumán, como se ve en el gráfico en promedio está distribución es aproximadamente de un tercio por cada ítem. Así es que en el gráfico se puede apreciar que en el total de la boleta promedio la incidencia de los impuestos es de aproximadamente el 30% mientras en CABA es del 21%.

Luciano Caratori, ex subsecretario de Planeamiento Energético de Argentina y director de la Consultora Caratori & Roitman, explicaba en una visita a Tucumán que comparar jurisdicciones en términos de la tarifa final es bastante difícil y suele ser bastante injusto y alertaba que hay que tener cuidado cuando se realizan esas comparaciones. Entre los aspectos diferenciales, como el impositivo, Caratori enunciaba las características de las redes, la voluntad de los reguladores de reconocerles Valor Agregado de Distribución a la distribuidora y el manejo financiero de las distintas compañías, incluida la deuda con Cammesa y su pago. En este último caso, existen Distribuidoras que, al no tener tarifas que les permitan solventar el servicio se financian incumpliendo el pago a CAMESSA.
Como ejemplo, según publicó el Diario La Nación, en diciembre pasado, las Distribuidoras firmaron un acta acuerdo con Cammesa, la Secretaría de Energía y Ente nacional regulador de la electricidad (ENRE), en el que se saldó parte de la deuda con CAMMESA. Por ejemplo, Edenor debía $105.777 millones a Cammesa, pero, al quitarle los intereses punitorios, el capital a refinanciar se redujo a $57.159 millones. En Tucumán, EDET SA, se benefició con una cancelación de $ 2.400 millones.
Otro de los aspectos a tener en cuenta en la composición tarifaria es con qué recursos se financian las inversiones para mantener y ampliar el servicio. En ese caso, por ejemplo en Santiago del Estero y La Rioja – para tomar como ejemplo – las inversiones están a cargo de los estados provinciales, mientras en Tucumán las mismas las realiza la empresa distribuidora con lo recaudado por la prestación del servicio.
Fuente: Asociación de Distribuidores de Energía Eléctrica de la República Argentina. (ADEERA)