El día después de la toma

Tras recuperar su propiedad, los hemanos Etchevehere ingresaron al campo para pasar la noche y ver como habían quedado sus instalaciones. Vaya sorpresa se llevaron al ver el estado en el que se encontraba su propiedad.

Sentimientos encontrados sentían los hermanos, por un lado, la felicidad de haber recuperado sus tierras, y por otro, la angustia de ver como quedó todo después de la toma.

Tras comer un guiso preparado por la casera, los hermanos Juan, Diego, Luis Miguel, su hijo y un amigo de la familia, tuvieron que dormir en una de las salas sobre colchonetas, porque los cuartos se encontraban en un “estado deplorable” señalaron en declaraciones al diario La Nación.

A la mañana, se levantaron dispuestos a poner en condiciones su campo, y comenta Luis Miguel Etchevehere en otra de las declaraciones: “lo de las carpas de los militantes para acampar fue un cuento”, “los 34 ocupantes habían usado la ropa blanca del campo y durmieron en los dormitorios”. “A partir de ahora, vamos a ponernos manos a la obra para reconstruir lo que destruyeron en 15 días”.

Además sentenció: “es como al día siguiente de una inundación en donde los productores en el campo vuelven a empezar”.

Además de que los postigos de puertas y ventanas fueron forzados y rotos, los hermanos siguieron encontrando destrozos y varias cosas que faltaban.

Siguiendo con el relato, los hermanos señalan que las barandas de la galería, también estaban rotas, al igual que las celosías, incluso realizaron pozos para construir hornos de barro que nunca fueron terminados, y otra de las sorpresas fue encontrar un altar del Gauchito Gíl en un patio interno.

Luis Miguel Etchevehere (ex Ministro de Agricultura( también comentó a La Nación que habían arrancado el bajomesada de la cocina y que los estantes de madera en donde guardaban los juguetes de sus hijos, que también eran de madera, los hicieron desaparecer, “como si hubieran hecho fuego”.

Sin embargo, las sorpresas siguieron para los Etchevehere, ya que se robaron un cuchillo que su padre les había dejado como herencia.

Luis continúa con el relato y mencionó que el daño económico en lo productivo es importante, que las pasturas se pasaron y se atrazó la siembra del sorgo forrajero y granifero.

Respecto al fallo judicial, el ex Ministro calificó al desalojo como un punto de inflexión en donde la justicia protegió y defendió la propiedad privada.