El INADI recibió al vendedor ambulante que fue agredido en un bar del centro

Alejo Ibáñez, el vendedor ambulante de 19 años que se hizo conocido la semana pasada por un video donde es golpeado por un mozo de un bar ubicado en el centro de la capital, se presentó ante el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi) para obtener asesoramiento sobre su caso.

El episodio ocurrió el miércoles pasado y dejó impactado a la mayoría de los tucumanos por la violencia con la que el empleado del local se enfrentaba al vendedor ambulante. «Fue Alejo quién se comunico conmigo personalmente. Me pareció preciso recibirlo dentro de la delegación para, más que nada, conocer la situación en primera persona de lo que pasó ese día», comentó el delegado del Instituto en Tucumán, Guillermo Pablo Gutierrez.

El video que rápidamente se viralizó dura 16 segundos y fue publicado el viernes por el periodista Ramiro Suárez Bellanti quien, además, relató en su cuenta personal de Facebook cómo conocía a éste joven. «(Alejo) se acercó a las mesas de un bar llamado “Bona”, en plena calle 25 de Mayo, a ofrecer sus medias. Nadie le compró, pero una señora que ya se iba le regaló su milanesa. (Alejo) se sentó en la mesa cuando la señora se levantó y se tomó una pausa para almorzar. Así se ahorraba una comida en el día y podía tener más plata para llevar a la casa. Pero de repente, mientras disfrutaba de un bocado, empezó a recibir piñas en la cara», escribió en aquél momento.

«No es solamente la violencia la que nos preocupa sino también la discriminación que se ve claramente en el video», aseguró Gutierrez. Según explicó, pusieron a disposición el organismo para que él joven realizara su denuncia. «Alejo también radicó una denuncia por agresiones físicas, que eran notables más que nada en su cara, en la comisaría; pero eso ya corre por cuenta de él», afirmó el funcionario.

Gutierrez detalló que, a pesar de que el organismo puede entender de Oficio sobre cuestiones que le competen, en este caso fue el mismo joven de 19 años quién decidió acercarse al delegado ya que las oficinas aún no están abiertas para la atención al público.

En una nota que Alejo brindó al diario ElTucumano explicó: “Me gustaría conseguir otro trabajo. Sé leer y escribir. No sé sumar ni dividir, pero aprendo rápido todo. He hecho hasta el primer año del secundario. Me han criado bien en mi casa. Me han enseñado a ser generoso. Si alguien no me compra y me da 10 pesos, esos 10 pesos son para la señora que pide en la Iglesia al frente de la superpanchería, o a Pedro, el gordito de los patitos. Entre todos nos tenemos que ayudar, ¿verdad? Si vos ayudás, la gente te ayuda. Tenés que ayudar para que te ayuden. Hay que ser buena gente. Por eso le pido a Dios que lo haga recapacitar a ese mozo y que se dé cuenta que está mal lo que ha hecho, que eso que ha hecho está mal”.

Este lunes Bellanti publicó en su cuenta de la red social Twitter que entregó a Alejo «$11.800, mercadería, pañales y ropa, donaciones de todas las personas que se comunicaron para ayudarlo. Estoy muy sorprendido y emocionado por tanta solidaridad desinteresada. Dice Alejo que muchas gracias». En la publicación también agregó que se encuentran interviniendo en el caso el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación y la Dirección de Juventud de Tucumán.