Elecciones en Buenos Aires: limite al autoritarismo
Por Federico Romano Norri (concejal UCR)
La gente se expresó no solo a favor de kicillof, sino fundamentalmente poniendo un límite al autoritarismo, al abuso de poder, al no respeto por la constitución y las instituciones. No ganó el kichnerismo, ganó la política bien entendida, ganó la cercanía a la gente, la gestión diaria, la solidaridad social, la política al servicio del ciudadano.Le pusieron un freno a quien a costa de los números pretendió sacar de las prioridades a los jubilados, discapacitados, a la ciencia y la tecnología, a la educación pública, y a tantos otros.
Son múltiples los factores que arrojaron este resultado: el no respeto por la oposición, por los aliados, por los gobernadores, por el parlamento y sobre todo por no respetar a su vice presidenta y la ciudadanía.
En la argentina no viven números, viven personas con necesidades, sueños y esperanza.Ellos con hechos de corrupción que deberán explicar, peleándose con todo el mundo sin buscar consolidar con el diálogo y el consenso su gobernabilidad. Todo pende de un hilo de la economía y esto comienza a cortarlo.Especulaban con Cristina sí o Cristina no, destruyendo el resto de los partidos de oposición.
Y sin embargo hoy crearon un nuevo monstruo Axel kicillof. No tienen tiempo de revertir los más de 13 puntos en 50 días y hoy kicillof pasa a ser el primer presidenciable. Pica en punta sin necesitar del protagonismo de Cristina.Esperemos que a partir de ahora la autocrítica reconocida en su discurso, le permita respetar las instituciones, la Constitución, el Parlamento y la oposición.
Ojalá busquen, en los dos años que quedan, generar acuerdos políticos, porque sino, con el atropello y atrevimiento se les hará muy difícil gobernar.Ganó solo dos de nueves elecciones la Libertad Avanza.
Ahora viene de sacar el 8 % en la provincia de Corrientes y perder por más de 13 puntos en Buenos Aires. Deben reflexionar quienes pensaron que llegaron para quedarse por muchos años.Solo está encendida la llama de Javier Milei y su personalismo. Pensaron que los candidatos, pongan a quien pongan, ganarían por el arrastre de Milei, subestimaron la elección y a la política.Política de hace con político, no con advenedizos que buscan trepar, llegar y llenarse los bolsillos desesperados por el poder y dinero.
Se necesita de compromiso, de responsabilidad, de solidaridad, de empatía, de entender y acompañar la problemática de la ciudadanía. Estar cerca, dar trabajo, dignidad y oportunidades.