Encuentran sin vida al trabajador golondrina desaparecido en un dique en Río Negro
Ayer jueves la policía confirmó que hallaron los cuerpos en el río Neuquén de los jóvenes que se habían ahogado en el dique Ballester.
Fue hallado el cuerpo de un hombre en aguas del Río Neuquén que pasan por una zona de chacras en Vista Alegre, en Río Negro. Desde ese momento todas las acciones se centraron en confirmar la identidad y si se trataba de uno de los jóvenes ahogados en el Dique Ballester el pasado domingo y que desde entonces eran intensamente buscados. Pero pocos minutos pasaron para que se tomara conocimiento de la aparición otro cuerpo flotando en la zona.
El jefe de Bomberos Voluntarios de Centenario, Patricio Álvarez confirmó a Diario Río Negro que ambos cuerpos son de José Cerdán, de 19 años, oriundo de Corrientes, y Carlos Leonel Ledesma, de 24 y oriundo de Tucumán.
Los dos se encontraban en Vista Alegre Norte por la temporada frutícola y se los había visto por última vez cuando se bañaban en una zona prohibida.
El punto exacto del primer hallazgo fue el curso de agua que topa con la calle 12 y desde que comenzó el rescate del cuerpo trabajaron en el lugar Bomberos Voluntarios de Centenario y personal Comisaria 49.
En simultáneo y mientras se trabajaba en la zona el destacamento policial fue informado del hallazgo de otro cuerpo, que también se trataba de un hombre, a pocos metros del Dique Ballester.
En este caso fueron unas niñas que se bañaban en un sector de poca profundidad las que se toparon con los restos. Según se pudo conocer, familiares de las víctimas ya fueron informadas y algunos allegados viajaron desde las provincias de donde eran originarios ambos jóvenes.
La familia acudió al Gobierno
El míercoles pasado, el vicepresidente primero de la Legislatura, a cargo del Ejecutivo, Regino Amado, había recibido en Casa de Gobierno a familiares de Carlos Ledesma. Se trataba de la madre, Fátima Jerez, donde el Gobierno se comprometió a realizar todas gestiones ante las autoridades de la provincia patagónica con la intención de acelerar la búsqueda del joven, que por esas horas permanecía desaparecido desde el domingo pasado.
De acuerdo al relato de su mamá, Carlos se desempeñaba como trabajador golondrina en la cosecha de la manzana. En una tarde libre, el joven junto a un grupo de amigos visitó la zona del dique Ballester. Uno de ellos, Cerdán, se sumergió en el río Neuquén y al no poder salir Carlos se arrojó a intentar salvarlo. Ambos desaparecieron y finalmente, desde Río Negro confirmaron que lamentablemente, hallaron los cuerpos sin vida de los dos jóvenes.