Finalmente: Roberto Rejas fue condenado a perpetua por el crimen de Milagros y Benicio
El tribunal lo declaró culpable y le dicto prisión preventiva hasta que la sentencia quede firme. Abrió la posibilidad de rever la pena en caso de que confiese qué hizo con los cuerpos.

Este miércoles, el tribunal integrado por los jueces Stella Maris Arce, Eduardo Romero Lascano y Alicia Freidenberg, decidió condenar a prisión perpetua a Roberto Rejas por encontrarlo culpable de los delitos de homicidio agravado por alevosía en contra de Milagros Avellaneda y de su hijo Benicio, y del delito de homicidio agravado por mediar violencia de género en contra de la mujer.
Además, los magistrados dispusieron que Rejas permanezca en prisión preventiva por el plazo de 6 meses o bien, mientras la sentencia quede firme.
Por otro lado, abrieron la posibilidad de reconsiderar la pena en caso de que el condenado brinde datos acerca del paradero de los cuerpos de Milagros y Benicio.
La sentencia fue coincidente con los planteos del Ministerio Público Fiscal y las querellas. El martes, durante los alegatos de cierre, la fiscala de Cámara, Estela Giffoniello, había solicitado que Rejas sea condenado a la pena de prisión perpetua y que sea detenido bajo prisión preventiva por peligro de fuga. Según la letrada, quedó acreditado que “el 28 de octubre de 2016, Roberto Carlos Rejas, Milagros Avellaneda y su hijo Benicio fueron al parque 9 de Julio. Allí discutieron y Rejas la golpeó y luego la mató. Se aprovechó de la vulnerabilidad de Milagros para deshacerse de ella, porque para él, la joven y su hijo significaban una amenaza laboral y en su vida”.
Para Estefanía Ávila, expareja de Rejas, la fiscala había pedido una pena de cinco años por encubrimiento. Mientras que para Roberto Fernando Rejas, padre del acusado, requirió que las actuaciones pasen a instrucción para que se lo investigue por tráfico de influencias, entre otros delitos.
Para ellos, el tribunal dispuso la absolución de Ávila por no encontrar elementos que probaran su participación en el encubrimiento; mientras que para Rejas -padre- se negó la instrucción solicitada por la fiscala, pero se ordenó la apertura de una causa por posible falso testimonio.
La lectura de los fundamentos del fallo se realizará en 10 días y, posteriormente, las partes contarán con los elementos para apelar la sentencia. Se da por descontado que la defensa de Rejas acudirá a Casación para que se revea la condena.
El caso
Milagros, de 26 años, y su hijo Benicio, de dos años, desaparecieron el 28 de octubre del 2016, cuando salieron de su casa del barrio Lola Mora, sin conocerse hasta hoy sobre su paradero.
De acuerdo a lo expuesto por los investigadores del caso, la joven y el niño estuvieron en el auto de Rejas en la zona del parque 9 de Julio. Milagros le envió mensajes a una amiga manifestándole que el acusado (a quien le reclamaba que Benicio era su hijo), le estaba pegando.
En esas circunstancias, Rejas los mato a ambos e hizo desaparecer los cuerpos. Según expuso Giffonielo durante el debate oral y público, en los días siguientes el condenado lavó “escrupulosamente” su auto y reemplazó las fundas del interior del mismo. Además, pidió información a un policía sobre el funcionamiento de ciertas cámaras de seguridad -precisamente las que se cree podrían revelar su ubicación junto a Milagros– y buscó en Google cómo descomponer un cadáver.