La tormenta causó caída de árboles y cortes de energía
El Servicio Meteorológico Nacional emitió un alerta naranja por tormentas en toda la provincia.
Tucumán se encuentra bajo la alerta roja según informó la Dirección de Defensa Civil. El director de la repartición, Fernando Torres, informó que se esperan lluvias persistentes y abundante acumulación de agua.
“Esta alerta tendría una duración desde hoy a la noche hasta mañana a las seis de la mañana, en general”, expresó Torres.
Hasta el momento, los registros indican que la máxima cantidad de lluvia se ha registrado en la zona de Concepción, alcanzando los 54 milímetros. Torres señaló que este pico de intensidad fue observado hace un par de horas, aunque en estos momentos persiste una lluvia moderada en esa área.
A pesar de la continua caída de agua, hasta el momento, dijo el director, no se recibieron informes de personas afectadas directamente por el temporal, aunque advirtió que podrían surgir novedades en las próximas horas.
Torres también informó sobre los efectos del temporal en los servicios públicos, destacando que “la lluvia vino acompañada en varios lugares con vientos muy intensos, lo que afectó muchos servicios de tendidos aéreos, como telecomunicaciones y servicios de EDET”.
“Me informan desde EDET que habría 120.000 clientes afectados. Están esperando que mejore el tiempo para trabajar sobre eso”, agregó Torres.
Explicando las causas detrás de este fenómeno meteorológico, Torres mencionó la llegada de un frente frío desde el sur. “Había unas condiciones de altas temperaturas y mucha humedad. Este viento, aire frío que entró desde el sur, generó una condensación importante y estas lluvias abundantes”, explicó.
El acumulado estimado de lluvia podría oscilar entre los 120 y 150 milímetros, según las proyecciones de Defensa Civil. Esta cantidad de agua podría desencadenar crecidas en algunos ríos y arroyos, así como problemas de desborde en ciertas zonas.
Ante esta situación, las autoridades instan a la población a mantenerse alerta y tomar las medidas de precaución necesarias hasta que el temporal remita.