Larreta y Morales no piensan dar marcha atrás con Schiaretti y Juntos se asoma a una ruptura
La tensión sigue al máximo en la coalición opositora y ya se habla del armado de una nueva alianza. Milei le abrió las puertas a Patricia.
Horacio Rodríguez Larreta y Gerardo Morales no piensan dar marcha atrás con la incorporación de Juan Schiaretti a pesar de la férrea oposición de Mauricio Macri y Patricia Bullrich. Con posiciones que parecen irreconciliables, Juntos por el Cambio se asoma a un escenario de ruptura.
Fuentes del espacio de Larreta y Morales confirmaron a LPO que el plan sigue sin cambios y afirmaron que en el transcurso de esta semana debe resolverse. También en el entorno de Schiaretti aseguran que no se baja del acuerdo.
La decisión se da después del intento de Macri y Bullrich de boicotear el ingreso del gobernador de Córdoba en la reunión de los presidentes de Juntos. Esta mañana el ex presidente salió a jugar fuerte y le advirtió a Larreta que «tiene que parar». El propio Macri admitió el riesgo de ruptura: «esto pone en crisis todo el sistema de la coalición».
En el entorno de Larreta dicen que el jefe de gobierno viene hablando desde hace tiempo de la necesidad de ampliar la coalición y de alcanzar acuerdos con el 70% del espectro político para sacar las reformas necesarias. Recuerdan, además, que el propio Macri insistía en incorporar a Schiaretti, por lo que ahora dicen que nadie debe darse por sorprendido.
Larreta tiene el respaldo interno de Morales, Miguel Pichetto, Elisa Carrió y Martín Lousteau. En ese bloque hay un acuerdo muy sólido para avanzar con la incorporación de Schiaretti y ya dicen que si Macri y Patricia mantienen la negativa podrían armar una nueva alianza. Esto es, romper Juntos por el Cambio.
Esa posibilidad todavía tiene muchísimos interrogantes. Por ejemplo, nadie sabe a ciencia cierta qué sucedería con los acuerdos en la Ciudad de Buenos Aires y las provincias si hay una ruptura de Juntos a nivel nacional. Pero esas dudas por ahora no frenan a los impulsores del acuerdo.
La cuestión inmediata ahora pasa por resolver la cuestión reglamentaria en la mesa de Juntos. En el PRO dicen que en el Consejo Nacional la cuestión está muy dividida y estará muy difícil sacar una resolución. La solución, dicen, requiere un acuerdo político.
El deadline es el próximo miércoles 14 de junio, el plazo límite para la presentación de los frentes electorales para competir en las PASO. Pero en el larretismo dicen que se resolverá esta semana, posiblemente el jueves.
Macri fracasó en su intento de bloquear el ingreso de Schiaretti y sigue la discusión
Como era previsible, el que aprovechó el río revuelto fue Javier Milei que salió a intentar pescar a Patricia. «Nosotros le abrimos las puertas», dijo el líder libertario, que desde hace tiempo coquetea con la exministra.
La idea de un acuerdo entre Patricia y Milei es el plan de Macri, que como contó LPO cree que la ruptura de Juntos es inevitable. El expresidente viene dando evidentes señales de acuerdo con el libertario, como resaltó Carrió. El problema en este caso es que Patricia no está convencida porque necesita la estructura de Juntos para poder ser competitiva.
El que aprovechó el río revuelto fue Javier Milei que salió a intentar pescar a Patricia. «Nosotros le abrimos las puertas», dijo el líder libertario, que desde hace tiempo coquetea con la exministra
El dato que más se resalta por estas horas en Juntos es que el sector de Macri y Patricia quedó en shock por la jugada de Larreta, que no se esperaban. Lo mismo le sucedió con el llamado a elecciones con boleta electrónica. En el entorno del jefe de gobierno creen que lo subestiman y no terminan de entender su estrategia.
Lo mismo le sucedió a dirigentes que se declaran «neutrales», como Emilio Monzó. El exdiputado sabía de las negociaciones con Schiaretti, que siempre fue su objetivo para sumar a Juntos. Monzó le había dicho a Larreta que lo apoyaría, pero cuando el acuerdo se hizo público le dijo al jefe de gobierno que se mantendrá neutral. Larreta entendió que jugará con Patricia.
Larreta apuesta fuerte a Schiaretti porque le garantiza una fortaleza importante en Córdoba, donde Milei y Patricia miden muy bien, pero también tiene buena imagen en Santa Fe, Mendoza y Santiago del Estero. Justamente en Santa Fe se dialogó para acercar a Omar Perotti, pero el gobernador quedó enredado en la interna del peronismo por la sucesión y no pudo despegarse.