Negaron la domiciliaria al acusado del crimen del carrero
El juez dispuso que Miguel Bartolomé Cajal cumpla dos meses de prisión preventiva en una comisaría o en el penal
El septuagenario acusado del crimen del carrero Santiago Ariel Melián deberá cumplir dos meses de prisión preventiva en una comisaría. Así lo dispuso el juez Bernardo L’Erario, quien además negó a Miguel Bartolomé Cajal la posibilidad de hacerlo en prisión domiciliaria.
El hecho ocurrió el sábado por la mañana, cuando la víctima, de 28 años, circulaba por avenida Alem al 2.300 en un carro en el que, además iban su esposa. Cajal, de acuerdo a la acusación, le salió al cruce y, con una escopeta, le disparó a la cabeza provocándole la muerte de inmediato. La escena quedó registrada en una cámara de seguridad y generó conmoción al volverse viral por las redes sociales.
Cajal luego se atrincheró en su domicilio y, tras cambiarse de ropa, se entregó a la policía. Sin embargo, fue necesario un allanamiento para que las autoridades pudieran entrar a la casa y secuestrar el arma homicida. Esa actitud fue resaltada por la fiscalía como un indicio de que el acusado no está dispuesto a colaborar con la Justicia. Además, resaltó que los testigos que deberán aportar datos son vecinos suyos, por lo que existe el temor de que el hombre los amenace. Por ello, solicitó que el acusado espere el juicio en prisión preventiva.
La defensa de Cajal, sin embargo, argumentó que el hombre, por su edad (tiene 71 años), no debería quedar privado de la libertad. Además, sostuvo que tiene múltiples dolencias que pondrían en riesgo su salud en un penal; entre ellas, que necesita realizarse diálisis tres veces por semana. En ese punto, denunció que en el día de hoy la policía no lo llevó a dializarse.
El Ministerio Público Fiscal sostuvo que no tiene acreditada fehacientemente su edad y remarcó un informe del médico forense que lo encuentra apto para cumplir la preventiva tras las rejas. El juez, entonces, hizo lugar a lo solicitado, remarcando que nuestra legislación establece que los mayores de 70 años “pueden” acceder a domiciliaria, pero que no es una obligación.
La familia del carrero asesinado también tomó la palabra y pidió justicia. Su tía, Rosa Valdez, participó de la audiencia en compañía de la madre y la esposa de la víctima. Sostuvo que, a su criterio, no se trató de un homicidio simple: “lo estaba esperando para matarlo, no ha medido consecuencias que (Melián) venía con una criatura”.
Respecto de la hipótesis de que el fallecido le había robado al acusado una moto, su tía señaló que “si mi sobrino, como se dice, ha sido un delincuente, todo lo que la gente quiera decir, creo que está la Justicia. Creo que él no tenía derecho a quitarle la vida a mi sobrino de la forma en que lo ha hecho”, indicó.