Persiste el dengue en Tucumán y ya son casi 40 mil los casos

Aunque en menor cantidad, todavía se registran casos. Esto significa que todavía existen mosquitos adultos capaces de transmitir la enfermedad y de reproducirse. Además, los informes del Servicio Meteorológico indican que este año podría adelantarse el verano y con él, volver a aumentar las infecciones.

A estas alturas del año, en brotes anteriores, el dengue ya era un mal recuerdo. Pero por el cambio climático, todavía hay casos en Tucumán, aunque cabe resaltar que se hace notar el descenso paulatino de la enfermedad: del 19 al 26 de junio se registraron 721 contagios, unos 100 por día, y en la semana siguiente se contabilizaron 400.

“Hace más de 20°C y esto trae como consecuencia que haya mosquitos adultos. Mientras haya personas que estén cursando la enfermedad, es normal que el mosquito las pique y transmita la enfermedad. Por lo tanto, es muy importante en este momento combatir y eliminar los reservorios», indicó esta semana el ministro de Salud, Luis Medina Ruiz, luego del reporte de estado de situación que semanalmente realiza esa cartera.

Ante esta situación, la Dirección General de Salud Ambiental continúa realizando bloqueos de la enfermedad y visitas a domicilios para erradicar el mosquito transmisor. Leandro Medina Barrionuevo, jefe de control del vector, contó que lo primero que hacen es visitar al paciente con resultado positivo, donde se le entrega repelentes y también se busca a nuevos sintomáticos en la misma zona. Además, se controla en las casas que no haya criaderos de mosquitos y se realiza fumigación.

“Ayer estuvimos en Banda del Río Salí y hoy estamos en la localidad de Alderetes. Nuestros operarios cuentan con una credencial que informa sobre sus datos personales y también un número de teléfono de la Dirección de Salud Ambiental para que, en caso de querer comunicarse para chequear, puedan llamarnos”, explicó el profesional.

En la oportunidad, Barrionuevo remarcó que la mejor forma de prevenir el dengue, la fiebre chikungunya y el zika es eliminar todos los criaderos de mosquitos para evitar que la enfermedad se siga propagando.

Normalmente, con la llegada del frío invernal se muere el mosquito adulto, permitiendo un alivio de los brotes epidémicos. Pero con temperaturas por arriba de los 20 grados, el vector persiste en las casas de los tucumanos.

Lo más preocupante es que el cambio climático podría alterar el ciclo estacional en Tucumán este año, dando paso a un verano anticipado y posiblemente omitiendo la primavera. Esto debido a que se confirmó la llegada del fenómeno conocido como el Niño, que en el hemisferio Sur suele traer aparejadas altas temperaturas.

Ante esto, es fundamental insistir en el compromiso de cada tucumano en la batalla contra el dengue. La estrategia es realmente sencilla: no permitir que haya reservorios en los hogares, eliminando cualquier recipiente capaz de contener agua estancada.

Muchos de los recipientes donde el mosquito se cría no son de utilidad (latas, botellas, neumáticos, trozos de plástico y lona, bidones cortados), por eso deben eliminarse y evitar que se acumulen, tanto en el interior de las casas como en el exterior (patio y jardín).

Si no se pueden eliminar los recipientes porque se usan permanentemente, evitemos que acumulen agua, dándolos vuelta (baldes, palanganas, tambores), tapándolos (tanques, cisternas, aljibes) o cambiándoles el agua y cepillándolos frecuentemente (bebederos de mascotas).

Tanto a nivel local como nacional ha sido la peor epidemia de dengue que ha ocurrido en toda la historia. Se registró un récord de 122.854 casos desde enero pasado y Tucumán es la provincia más afectada, con más de 39 mil contagios (en 2020 se registraron 7.806 casos). También se han producido 65 muertes durante 2023.