Proteger la salud también es educar
El riguroso invierno pone en riesgo la salud de los tucumanos, especialmente de los niños y adolescentes.
Este cuadro obliga a las autoridades a reprogramar las actividades escolares, la suspensión temporaria no implica la perdida de conocimiento.
Por especulación política no se puede jugar con la salud y bienestar de la niñez, que debe ser protegida como derecho fundamental.
Ante un invierno con características excepcionales. El gobierno provincial ha procedido con certeza, buscando proteger de manera primordial a los sectores más vulnerables de la sociedad.
Situaciones como esta ponen de relieve la indiferencia de los críticos ante la disposición del poder ejecutivo. Las exigencias de los puristas esconden otra cosa: perseguir réditos electorales en circunstancias de vulnerabilidad de la población y falta de empatía.
Quienes hoy exigen condiciones óptimas en las escuelas, son los mismos que promueven recortes sistemáticos a la educación pública, desfinancian programas escolares y precarizan la labor docente.
No se puede hablar de calidad educativa mientras se desmantelan las herramientas para garantizarla.
La educación no se toca. La infancia, tampoco.
Concejales Carlos Ale y Ana González – Concejales PJS.
