¿Quién ganará la elección presidencial en EEUU?
Para ser elegido presidente de Estados Unidos se requiere obtener al menos 270 de los 538 votos electorales. Florida y Ohio son decisivos en esta elección.
Estados Unidos elige este martes 3 de noviembre al presidente que regirá los destinos de la nación durante los próximos cuatro años. El demócrata Joe Biden enfrenta al republicano Donald Trump, quien va por un segundo mandato, en unas reñidas elecciones en las que las encuestas poco convencen al electorado.
La experiencia de 2016 demostró que los sondeos de opinión se equivocan. Hace cuatro años, todas las encuestas daban como contundente ganadora a la demócrata Hillary Clinton. El New York Times se atrevió incluso a asegurar que la exsecretaria de Estado tenía 91 % de probabilidades de ganar frente a apenas 9 % de probabilidades de Donald Trump.
El comportamiento histórico del electorado indica que el Partido Republicano ha ganado en las últimas cinco elecciones presidenciales consecutivas en Alabama, Alaska, Arizona, Arkansas, Georgia, Idaho, Kansas, Kentucky, Louisiana, Mississippi, Missouri, Montana, Nebraska, Dakota, Oklahoma, South Carolina, South Dakota, Tennessee, Texas, Utah, West Virginia y Wyoming. Estos 22 estados considerados prácticamente seguros para los republicanos suman un total de 180 votos electorales.
Por su parte, los demócratas han logrado la hazaña de ganar de forma seguida las últimas cinco elecciones presidenciales en California, Connecticut, Delaware, Distrito de Columbia, Hawaii, Illinois, Maine, Maryland, Massachusetts, Minnesota, New Jersey, New York, Oregon, Rhode Island, Vermont y Washington. En estos 16 estados, los demócratas tendrían prácticamente seguros 196 votos electorales.
La batalla se dará en los llamados estados pendulares. Se trata de entidades en las que se han registrado victorias demócratas y republicanas. De acuerdo con este análisis, hay 13 estados en los que ninguno de los dos partidos ha logrado cinco victorias consecutivas desde el año 2000. Estos estados aportan un total de 162 votos electorales.
En algunos de estos estados se puede notar una inclinación de la balanza más clara que en otros. Por ejemplo, en Indiana y North Carolina los republicanos han logrado cuatro victorias en las últimas cinco elecciones. Por el otro lado, el Partido Demócrata se ha quedado con cuatro victorias en Michigan, New Hampshire, New Mexico, Pennsylvania y Wisconsin.
Colorado, Florida, Iowa, Nevada, Ohio, y Virginia son los estados con una tendencia menos clara en los últimos cinco comicios presidenciales. ¿Quién ganará la elección este 3 de noviembre? En este escenario, todo indica que el candidato que logre quedarse con Florida y Ohio tiene la Presidencia prácticamente asegurada. Entre estos seis estados con una tendencia histórica menos definida, Florida y Ohio son los que aportan mayor cantidad de votos electorales, con 29 y 18, respectivamente.
Un factor importante a considerar y que suele tumbar los pronósticos de las encuestas en Estados Unidos es el hecho de que no es una elección directa en la que se elige al presidente con el resultado del voto popular nacional.
El sistema electoral
Para ser elegido presidente de Estados Unidos se requiere obtener al menos 270 de los 538 votos electorales. El voto popular escoge por estado los 538 miembros del Colegio Electoral que emitirán sus votos para elegir al presidente. El voto popular no determina directamente quien gana la Presidencia. Todos los electores de un estado votarán por el partido más votado en ese estado, excepto en Maine y Nebraska, donde se reparten de manera proporcional.
En caso de que ninguno de los dos candidatos alcance los 270 votos electorales, la 12ª enmienda establece que la Cámara de Representantes elige al presidente y el Senado elige al vicepresidente, explica France 24 en un artículo titulado ¿Qué sucede si se impugnan las elecciones estadounidenses? Este escenario no se presenta desde hace 195 años.
Aquí entrarían en juego las delegaciones estatales. Cada delegación estatal emite un voto, que dependerá del partido mayoritario en cada delegación.
Los miembros de la Cámara deberán elegir al presidente entre los tres candidatos que obtuvieron más votos electorales. Considerando que la Unión Americana tiene 50 estados y que se requiere mayoría absoluta, basta con 26 votos para conseguir la proclamación.
La elección contingente
Es necesario que en la Cámara de Representantes ocurra un empate, en este caso 25-25, para avanzar al siguiente escenario. La vigésima enmienda establece que el vicepresidente electo asumirá las funciones de presidente hasta que se logre determinar el ganador de la Presidencia.
En una elección contingente el vicepresidente lo escoge el Senado entre los dos candidatos que obtuvieron más votos electorales. En este caso, cada uno de los 100 senadores de la Cámara Alta emite un voto, y se requieren 51 votos para ganar.
Haría falta que se repitiera un empate en el Senado, para que al no haber vicepresidente electo, se aplicara entones la Ley de Sucesión Presidencial. Esta norma establece que el presidente de la Cámara de Representantes, el presidente del Senado o un funcionario del Gabinete, en ese orden de prioridad, podría asumir como presidente interino hasta que se logre elegir el presidente o el vicepresidente.