Se fue el amigo Gabriel Fulgado y dejó un espacio vacío difícil de llenar
Hoy cuesta mucho escribir… trato de recordar todos los detalles, las anécdotas, los momentos, las charlas, las risas… pero cuesta. Me duele el alma… Quedé en deuda con vos, en una charla te prometí que ibas a ser uno de los primeros personajes de Prensa Activa Digital, pero nunca imaginé que este bicho (covid) metería la cola y dejaría inconclusa esa promesa de juntarnos… Estabas escribiendo para algún día llegar a hacer un libro con tu vida. Cuántas cosas para contar y compartir querido Nene Fulgado… A los 68 años y con muchos proyectos en tu cabeza dando vuelta, dejaste este mundo terrenal, pero dejaste una familia maravillosa y un legado cultural increíble para los tucumanos.
Tuve el placer de conocerte y trabajar con vos y que esta profesión nos haya convertido en amigos. Yo muy orgullosa de esto… se que no te quedaba un detalle por supervisar, que los días de los shows llegabas temprano, no comías y querías que todo salga perfecto.Temprano estaban los chicos del Tulio, a los que siempre dabas una mano, quizás evocando tu paso por esa institución… Te gustaba trabajar con mucha gente, que no falte nada ni nadie. Fuiste generoso como pocos. A veces los shows iban muy bien, a veces había que raspar la lata para pagar todo, pero como todo hombre de bien dabas la cara y enfrentabas lo que sea.
Productor con mayúscula… Tucumán y los tucumanos asistimos a los mejores shows de tu mano: Maná, Roxette, Joan Manuel Serrat, Joaquín Sabina, Emma Shaplin, el Ballet Bolshoi, Duran Duran, Raphael, Roberto Carlos, Luis Miguel, Rosana, Myriam Hernández, Alberto Plaza y cuantos artistas internacionales que hoy me cuesta recordar y los nacionales: Pimpinela, Valeria Lynch quien junto a Hebe eran sus amigas, Patricia Sosa, Luciano Pereyra, Miranda… tantos y tantos que es difícil enumerarlos. Te encantaba ver el crecimiento de los artistas tucumanos, siempre había un lugarcito para ellos como teloneros. Disfrutaba de todos los géneros, pero tu corazón estaba con el rock, naciste en su apogeo y te acompañó siempre.
Hoy me toca despedirte. No tengo otro modo de hacerlo. Lo hago con tristeza y nostalgia, recordando el amor con que mirabas a tu hija y a tus nietos a los que abrazo fraternalmente… Gracias por tu dedicación y compromiso con el espectáculo. Hasta siempre querido Gabriel Fulgado.

