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Adiós a Botero: un artista que sembró el mundo de “gordas” fenomenales y batió récords

A los 91 años, murió en su casa de Montecarlo, en el principado de Mónaco, el pintor, escultor y dibujante colombiano Fernando Botero. Creador sin límites, dueño de una figuración desmesurada, fue durante años el campeón de los récords en las subastas latinas de Nueva York.

Desde Valentino a Versace el mundo del arte y del coleccionismo amó su pintura lisa “como una tela de Piero della Francesca”, dicho por él mismo durante una larga entrevista para LA NACION en su piso de Park Avenue, en el Upper East. Era una tarde helada en Manhattan y el colombiano universal tenía ganas de hablar. Preparó té verde y, como un narrador entrenado, relató su infancia en Medellín, se refirió a su madre costurera y los hilos de colores, habló de las sierras y de los caballos, temas recurrentes en su obra, eclipsada por las fenomenales gordas, leves en la desmesura. Inspiradas en las prostitutas de los piringundines de su tierra, lo consagraron como un artista original y potente. Fue un dandy que amaba el arte, la vida, las mujeres y la rica comida.

Llevó por el mundo, hasta sus últimas muestras en China, una imagen inconfundible siempre acompañada de un fabuloso éxito comercial, obras por arriba del millón de dólares que en los años 90 los compradores se quitaban de las manos. Colgó en aquella década una muestra en Buenos Aires, organizada por Teresa Anchorena, su gran amiga de los años de París. La exposición en Bellas Artes fue un éxito de público y dejó para la ciudad el Torso masculino desnudo de su autoría que está en el Parque Thays, sobre la avenida Del Libertador.

Doce años después de aquella muestra que en los años 90 dejó de legado la escultura que los porteños disfrutan en Parque Thays, el Museo Nacional de Bellas Artes volvió a hacer una exposición con obras de Botero en 2006
Doce años después de aquella muestra que en los años 90 dejó de legado la escultura que los porteños disfrutan en Parque Thays, el Museo Nacional de Bellas Artes volvió a hacer una exposición con obras de Botero en 2006 Aníbal Greco

Llevó por el mundo, hasta sus últimas muestras en China, una imagen inconfundible siempre acompañada de un fabuloso éxito comercial, obras por arriba del millón de dólares que en los años 90 los compradores se quitaban de las manos. Colgó en aquella década una muestra en Buenos Aires, organizada por Teresa Anchorena, su gran amiga de los años de París. La exposición en Bellas Artes fue un éxito de público y dejó para la ciudad el Torso masculino desnudo de su autoría que está en el Parque Thays, sobre la avenida Del Libertador.

Doce años después de aquella muestra que en los años 90 dejó de legado la escultura que los porteños disfrutan en Parque Thays, el Museo Nacional de Bellas Artes volvió a hacer una exposición con obras de Botero en 2006
Doce años después de aquella muestra que en los años 90 dejó de legado la escultura que los porteños disfrutan en Parque Thays, el Museo Nacional de Bellas Artes volvió a hacer una exposición con obras de Botero en 2006 Aníbal Greco

Hombre de mundo, auténtico bon vivant, vivía entre Medellín, Grecia, Pietrasanta, París y Montecarlo, cosechando amigos y compradores. Pierre Levai, director de la Galería Marlborough de Nueva York, consideraba a Botero un fuera de serie, el inventor de un estilo, de una manera y de una paleta personal en la gama de los pasteles. Además de sus pinturas ya exitosas, lo consagraron sus rotundas esculturas que trasmitían un sensación de poder y de gozo. Obras como Mujer recostada o sus caballos indolentes integran el podio de La casa de las gemelas AriasLa familia presidencial o Pablo Escobar muerto.

El "Torso masculino denudo" de Fernando Botero que es un ícono porteño en el Parque Thays
El «Torso masculino denudo» de Fernando Botero que es un ícono porteño en el Parque ThaysShutterstock

Daniel Maman, uno de sus galeristas, lo consideraba un artista en alza que tenía por delante el mercado asiático con cotizaciones millonarias para sus esculturas. En la última edición de arteba, el stand de la galería argentina en la feria vendió un dibujo del colombiano por 350.000 dólares: Mujer con espejo. “A Jorge Pérez -confió hace un momento desde Miami- le vendí ocho esculturas”.

"Mujer con espejo (2011)", dibujo sobre tela de Fernando Botero, en galería Maman, se vendió por US$350 mil en la reciente edición de arteba
«Mujer con espejo (2011)», dibujo sobre tela de Fernando Botero, en galería Maman, se vendió por US$350 mil en la reciente edición de artebaGentileza Maman

El arte era su vida. Lo rescató del dolor y el desconsuelo cuando perdió a su hijo menor, Pedrito, en un accidente automovilístico, entre Madrid y Valencia. Recordaba, siempre en presente, esa escena trágica: la pérdida del niño amado a quien pintó una y otra vez.

Botero murió hoy en Montecarlo, confirmó su hija Lina Botero; el artista que había enviudado en mayo
Botero murió hoy en Montecarlo, confirmó su hija Lina Botero; el artista que había enviudado en mayoMark Lennihan – AP

Con su última mujer, Sophia Vari, formaba un dúo de cómplices, socios en la vida y en el arte, protagonistas de un amor sin grietas. Sophia murió de cáncer en mayo. Golpe duro de superar.

"Mujer fumando", en Piazza della Signoria, en Florencia: de manera transitoria o permanente, Botero sembró decenas de ciudades de todo el mundo con obras de su emblemático estilo
«Mujer fumando», en Piazza della Signoria, en Florencia: de manera transitoria o permanente, Botero sembró decenas de ciudades de todo el mundo con obras de su emblemático estiloFabrizio Giovannozzi – AP

Hace unos días, mientras pintaba, una pulmonía lo llevó al hospital de Montecarlo. Salió recuperado. Pero sus días estaban contados. Murió en su ley, sin haber dejado jamás de crear.

Por Alicia de Arteaga (La Nación)

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