Biden prometió defender los derechos humanos en su próxima reunión con Putin
El presidente estadounidense sostuvo este domingo que en su próxima reunión con su par ruso, Vladimir Putin, el 16 de junio, le dirá que Estados Unidos no permitirá que Rusia «viole» los derechos humanos, aunque aseguró que no quiere «desencadenar un ciclo de escalada y conflicto» y que está insistiendo en su deseo de diálogo.
«Me reuniré con el presidente Putin en un par de semanas en Ginebra, Suiza, para dejarle claro que no, no nos quedaremos de brazos cruzados y dejaremos que abuse de esos derechos», dijo Biden en un discurso, citado por la agencia de noticias AFP.
El presidente demócrata también recordó que mantuvo una larga conversación telefónica en febrero con su par chino, Xi Jinping, en la cual dejó en claro que «no podemos hacer otra cosa que defender los derechos humanos en todo el mundo, porque eso es lo que somos».
«Estados Unidos es único. Es una idea«, insistió. «Para nosotros, el hecho de que todos los hombres y mujeres nacen iguales es un hecho«.
Biden se reunirá con Putin el 16 de junio en Ginebra, en un momento de gran tensión entre las dos potencias rivales.
El mandatario estadounidense está mostrando una gran firmeza frente a Rusia, en un cambio de estrategia respecto de su predecesor Donald Trump, acusado de complacencia con el jefe del Kremlin.
Aunque promete volver a castigar a Rusia «si sigue interfiriendo» con la democracia estadounidense, y llegó a llamar «asesino» a Putin, Biden aseguró que no quiere «desencadenar un ciclo de escalada y conflicto» y está insistiendo en su deseo de diálogo.
El portavoz de Putin, Dmitry Peskov, advirtió la semana pasada que “es difícil esperar que sea posible llegar a un entendimiento sobre los desacuerdos profundos durante una sola primera reunión” entre Moscú y Washington.
La Casa Blanca también estableció bajas expectativas para la reunión y dejó en claro que no es probable que la cumbre de Ginebra produzca grandes avances.
Los lazos de Rusia con Estados Unidos y sus aliados se hundieron a mínimos posteriores a la Guerra Fría por la anexión de Crimea de Ucrania por parte de Rusia en 2014, su apoyo a los rebeldes separatistas en el este de Ucrania, la supuesta interferencia de Moscú en las elecciones estadounidenses en las que ganó Donald Trump, los ataques de piratería informática y otros factores que irritan a Washington.
El Kremlin, por su parte, negó las irregularidades y denunció las sanciones occidentales como un intento de limitar el desarrollo de Rusia.
La cumbre en Ginebra concluirá el primer viaje internacional de Biden como presidente, luego de su visita a Reino Unido para una reunión de líderes del Grupo de los Siete y una cumbre de la OTAN en Bruselas.
Según informó la cadena de noticias CNN, se espera que la agenda incluya el control de armas, la situación en Ucrania, la desviación forzada de esta semana de un vuelo con destino a Lituania por el aliado ruso Bielorrusia, los esfuerzos de ambas naciones para detener la pandemia de coronavirus y más.