El régimen de Kim Jong-un mostró el nuevo misíl de Korea del Norte
El misil estaba colocado en un vehículo lanzador de 11 ejes, y se mostró en un desfile militar por los 75 años del Partido Único en ese país, y vuelve a sacudir y a poner en alerta al gobierno norteamericano. Esta arma cuenta con una ojiva en la que se puede introducir varias cabezas nucleares, mide aproximadamente 24 metros de largo, y es el misil balístico intercontinental de combustible líquido mas grande del mundo, según anunciaron los expertos en la temática. Por supuesto, la palabra de los especialistas en la materia de ambos países no se hicieron esperar para poder entender que es lo que representa esta muestra a la que ellos consideran “una amenaza explícita al gobierno de Trump”.
Jefrey Lewis (Middlebury Institute) señala que esta acción busca poner a prueba el Sistema Antimisiles de Estados Unidos en Alaska.
Los especialistas norcoreanos, en cambio, señalaron que los artefactos que se exhiben en los desfiles pueden ser maquetas y si no se prueban, no se puede comprobar que realmente funcionen.
Melisa Hanhan, investigadora de la organización Open Nuclear Network afirmó que si Corea es capaz de producir sus propios chasis, serán menos las limitaciones de ICBM que podrá lanzar este armamento.
Andrei Lankov, del Corea Risk Group, declaró ante la agencia AFP, que “Corea del Norte es una potencia nuclear, y es probablemente la tercera potencia nuclear capaz de atacar ciudades estadounidenses después de Rusia y China”.
Volviendo a los dichos de Jefrey Lewis del Middlebury Institute, el experto agregó que el costo de inversión para EEUU sería de mil millones de dólares para tener entre 12 y 16 interceptores por cada misil, suponiendo que Korea transporte en el ICBM, 4 ojivas, y agregó: “a ese precio, estoy casi seguro de que Korea del Norte puede añadir ojivas mas rápido de lo que nosotros podemos añadir interceptores”.
Por último, Shim Beon-chul, del Instituto de Investigación Coreano para la Seguridad Nacional, detalló que al exhibir el misil, el régimen evitó cruzar una línea roja, pero fue contundente y aseguró: “Esto muestra que Corea del Norte podría proceder a un lanzamiento si Trump resulta reelegido e ignora la cuestión norcoreana”, “algo que también podría hacer, si Biden es elegido y no escucha a Pyongyang”.
La última negociación que se realizó por la desnuclearización del país norcoreano fue en la cumbre de Hanoi, llevada a cabo en 2019, pero luego de esta cumbre, las negociaciones quedaron estancadas.
