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Estudiantes celebra sus jóvenes y venturosos 100 años de vida

El 21 de agosto de 1920 nacía el Club Atlético Estudiantes, con otro nombre y otra sede, pero con la misma convicción de que niños y adolescentes disfruten y vivan a pleno el deporte. Sin grandes festejos pero con muchos éxitos y desafíos para hacer realidad. Salud Cebras.

Hoy, Barrio Norte está de fiesta y no es para menos, es que el popular y glorioso club Estudiantes está cumpliendo 100 años y lo hace en un momento muy especial, donde no habrá grandes celebraciones, pero sí con la convicción de que ha retomado el camino del éxito que emprendió hace muchos años atrás, casi desde sus comienzos.

Lo que cuenta la historia

Un día como hoy, hace 100 años nacía el Club Atlético Estudiantes y comenzaban a latir los corazones cebras, en clara referencia a los colores (negro y blanco) que lo hicieron popular por su trayectoria en el baloncesto tucumano.

Fue fundado el 21 de agosto de 1920 y la sede social funcionaba en calle San Martín al 600, lugar que hoy ocupa una importante farmacia. Por aquellos años la calle se llamaba Las Heras.

Por esos tiempos cada vez que un equipo del club se presentaba de local, lo hacía en el Gimnasio 24 de Septiembre, ubicado en el predio que hoy ocupa el Hospital Centro de Salud.

Inicialmente, nació como una institución abocada al boxeo, por eso se la denominó Luis Angel Firpo, en homenaje a quien fue una gloria del boxeo de los años ’40. Pero, poco tiempo después se pensó en otra disciplina deportiva para reemplazar a ese ‘violento deporte’.

Así nace el Club Atlético Estudiantes, tal como se lo conoce en la actualidad. Y bajo esta denominación llegó a conseguir numerosos títulos de básquet en primera División y en sus formativas.

Desde su comienzo, las formativas fueron cimiente de esta institución. Con mucho esfuerzo, las divisiones inferiores han participado de cuanto torneo se realiza en el país, y hasta ostenta orgulloso ser la institución que ganó el Primer Campeonato de Mini-Basquetbol, allá por la década del ’60.

Lo que siguió a partir de eso, es una historia conocida por muchos fanáticos del baloncesto que reconocen a este club como uno de los referentes de esa disciplina en la provincia.

Muchos fueron los jugadores cebras que se destacaron, a lo largo de estos 100 años, pero sin lugar a dudas, Antonio Bollea, el primer tucumano en jugar en la Selección Argentina, ocupa un lugar de privilegio en el corazón de los hinchas, ya que surgió en este club, en el que jugó durante las décadas del ’40 y del ’50.

Los colores negro y blanco son los que lució orgulloso también otro emblemático jugador de la institución como lo fue Héctor Pertot.

Los años han pasado, pero la pasión y el fuego sagrado están intactos para esos seguidores que supo conquistar el básquet de calle Monteagudo 955, en el estadio Ricardo “Coco” Ascárate.

Un presente venturoso

Las necesidades son muchas, como en cualquier sede deportiva, pero la ambición y la voluntad de un grupo de personas va logrando cambiar la cara de la institución. El estadio Ricardo “Coco” Ascárate, se ve diferente, renovado y el año pasado logró su ansiado piso deportivo. Y los éxitos deportivos acompañaron ese gran emprendimiento. Quizás quede inmortalizado para la historia el 2019 como el año que se consagró campeón del Apertura y Clausura, en la local y campeón del Regional del Noa.

Sergio Echevarría, presidente del centenario expresó a Prensa Activa Digital como se siente en este momento: “Ser presidente de esta querida institución justo en el centenario, era algo que ni me imaginaba. Siento un orgullo inmenso y una gran responsabilidad también. El club se hace día a día con el  trabajo de todos. Hay que estar todos los días en el club y conocer a fondo sus necesidades. Quienes me precedieron en esta función también merecen ser reconocidos por todo lo que hicieron por el club”.

Sobre este tiempo especial, Echevarría aseguró: “La pandemia nos afectó económica y deportivamente. Veníamos muy bien a nivel país, en lo deportivo. Y en cuanto a lo económico es poco el dinero que ingresa, por suerte hay socios que quieren darle una mano al club… y colaboran, pero ver las canchas vacías nos duele y resulta muy extraño.

El piso deportivo llegó en el 2019. “Era un gran anhelo para todos y por suerte lo pudimos lograr, gracias al aporte de muchas personas. Por otra parte, se viene haciendo un gran trabajo en inferiores y empezamos a ver sus frutos. Después de 51 años logramos un bicampeonato en lo local y ser campeones regionales”. Para el presidente, resulta oportuno agradecer “el esfuerzo de todos: técnicos, jugadores, amigos, hinchas, familiares, allegados… todos hacen que este lugar sea muy especial.

Cientos de niños y adolescentes juegan y se divierten en la escuela de básquet que posee la institución. Lo mismo sucede con las distintas categorías: U13, U15, U17 y U19. “Ojalá mucho de ellos se destaquen por su juego, pero mejor aún si lo hacen por haberse formado como buenas personas dentro de nuestro querido club”, expresó Alexis Clemente el profesor que más tiempo lleva en la institución cebra.

Por su parte, Gustavo Gaete, entrenador de la Primera, sobre el presente deportivo de “Las Cebra” agregó: “Cuando este año se suspendió todo, estábamos jugando un torneo Federal y siendo protagonistas. Todo venía muy bien, por sobre todo disfrutando del proceso, del camino… Estamos bien para cuando tengamos que volver. Hay un proyecto ambicioso para no conformarnos solo con lo logrado. Tenemos muchas ganas de volver a la actividad”.

El cestoball, destacado a nivel local y nacional

Hace unos cinco años llegó a Monteagudo 955, otro deporte que le aportó gloria: el cestoball, bajo la responsabilidad de Melina Véliz, quien acompañada de Gimena Argañaraz y Verónica Barragan lograron consolidar un grupo representativo.

“Queremos agradecer de todo corazón, las puertas que se abrieron para nuestra disciplina, que por ese entonces no era tan conocida. Logramos constituir una gran familia dentro de la familia del club y ser parte de la historia. Colaboramos con más estrellas para hacer más glorioso el cielo de “Las Cebra”. Estamos orgullosos de vestir esos colores, a nivel local y nacional”, expresó Melina Véliz, DT de las selecciones tucumanas de mayores y además de la Selección Argentina de Cesto Masculina.

La llama de los 100 años debe seguir encendida para poder transmitirles a los más jóvenes que son el futuro del club, el valor y el sentimiento de ser parte de una gran institución como lo es el club Atlético Estudiantes.

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