Trump en su laberinto
Mientras el presidente Trump mira noviembre con temor y desconfianza los Demócratas siguen con la sombra del fantasma del 2016
Hillary Clinton lideraba en el conteo de las mesas electorales que le auguraban un triunfo sobre Trump en 2016, sorpresivamente el voto popular se empezó a mover en distritos claves y transformó la elecciones en un campo de batalla. Esos recuerdos se transformaron en un fantasma que genera temor en la máquina Demócrata.
Pero las elecciones del 2020 no son las elecciones del 2016.
Pero porque no son las elecciones del 2016? bueno, muchas circunstancias cambiaron al margen que los dos candidatos fueron los candidatos menos queridos por los votantes de ambos partidos. Hace muchos años que no se daba una situación que los dos candidatos eran resistidos en la misma medida en los dos dos grupos de votantes.
También tenemos la llegada de Mister covid 19 que se enseñorea con las economías mas importantes y sobre todo con la norteamericana. El virus no le da respiro a Mr Trump y su «Make America Great Again». Trump sabe que su base es la economía y los números, esos números que venían jugando a su favor hasta la llegada de la pandemia .
Por otro lado Trump esta mostrando que tiene un techo electoral de alrededor del 46%. En las mediciones de marzo le dieron un 45,6% y solo en unas cuantas de cientos de mediciones llegó a medir 47%. Mientras Biden se muestra más alto en la preferencia del voto popular y mide muy cerca pero más alto que Trump.
Agreguemos que el tercer partido norteamericano que en promedio lleva a un 6% de votantes fue decisivo para el triunfo de Trump, no porque lo hayan votado sino porque le sacó votos al partido Demócrata. Biden esta trabajando muy cerca con Bernie Sander a diferencia de Hillary. Sander es el senador por Vermont que tiene mucha llegada al electorado millenial del partido Demócrata y le serviría a Biden para contener votos de izquierda.
Otra ventaja a favor de Biden es que los candidatos independientes son menos destacados y no captan la atención del público en estas elecciones. Tal vez lo más importante para el candidato Demócrata es que no es un candidato resistido o poco atrayente como lo fue Hillary Clinton.
Comparemos los dos candidatos demócratas y su posicionamiento frente a sus respectivas elecciones.
Julio 2016: Clinton 34% positivo, 56% negativo con un 43% «muy negativo»(NBC/WSJ poll)
Julio 2020: Biden 34% positivo, 46% negativo, con un 33% «muy negativo» (NBC/WSJ poll)
Esa diferencia de un 10% muy negativo a favor de Biden significa que el voto Demócrata no se va a mover a un candidato independiente. También es fundamental saber que mucho del potencial voto independiente que se decante por Biden va a ser un voto anti-Trump.
Lo que si es cierto es que nada está determinado y muchas circunstancias pueden cambiar a favor de uno u otro candidato. Trump lo sabe y está preocupado mas allá que sus seguidores repitan que en el 2016 venían detrás en las encuestas y dieron vuelta la elección en los últimos días de la misma.
