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Varias provincias evitan cerrar todo e interpretan “a su manera” el último decreto presidencial

A woman walks near a board advertising Health Ministry advise reading «Stay at home» during the outbreak of the new Coronavirus, COVID-19, in Buenos Aires, Argentina on March 19, 2020. (Photo by JUAN MABROMATA / AFP)

Mendoza hizo punta. Pero en Santa Fe, Tucumán y Jujuy no se aplicaron restricciones tajantes.

Primero fue Mendoza la provincia que de manera tajante se opuso a la decisión del Gobierno Nacional de retroceder a la fase 1 de la cuarentena. Fue el mismo gobernador, Rodolfo Suárez, el que desafió la palabra del presidente Alberto Fernández de la siguiente manera: «Vemos en el decreto presidencial que hay muchas zonas grises que hay que aclarar. Se habla de departamentos y no de conglomerado urbano. Hoy los mendocinos pueden trabajar y vamos a defender el empleo. La apertura económica hay que defenderla porque no podemos vivir en confinamiento permanente», dijo el mandatario mendocino.

Suárez reafirmó: “El esfuerzo que hicimos lo vamos a mantener y no vamos a volver a Fase 1”. Antes que Suárez, los mismos comerciantes de Mendoza, el lunes temprano, se habían puesto de pie para abrir sus negocios. Nada de cierre. El caso Mendoza cayó como un balde de agua fría en la Casa Rosada, que no pudo impedir que otras provincias siguieron el ejemplo de los mendocinos.

El gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, secundó a Fernández en el anuncio del viernes, pero al día de hoy no tiene previsto definir nuevas restricciones. «Las ciudades que figuran en el DNU están en ASPO, pero con aperturas. Hay que convivir con el virus», dijeron desde la gobernación. Esas ciudades son Santa Fe, Rosario, Gran Rosario y San Lorenzo.  El gobernador evalúa solicitarle a Santiago Cafiero el regreso de la actividad náutica.

El gobernador de Tucumán, Juan Manzur, quedó a contramano. Tras el DNU, el peronista anunció que San Miguel de Tucumán retrocedería con algunas habilitaciones para bares, comercios y gimnasios. Sin embargo no pudo sostener las medidas: 24 horas después, dio marcha atrás y cedió a los reclamos del sector empresario para que los locales siguieran funcionando con protocolos. Este martes, sus funcionarios salieron a ratificar que se cumplía con el decreto del presidente. Pero lo cierto es que en la calle se ve la cuarentena laxa, a pesar de los indicadores epidemiológicos.

Algo similar en Jujuy, donde se comprometieron a analizar «no solo los indicadores sanitarios» para tomar una decisión sobre aquello que impone el decreto del presidente Alberto Fernández. 

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